San Telmo - 0
Perassi forcejea con Vaccaría.
Cuando parecía que el Candombero encontraba el rumbo en el campeonato, volvió a jugar mal y mereció perder ante los de Maschwitz. Gambandé fue figura y sólo se genero una jugada de riesgo....en tiempo adicionado del segundo tiempo.
El segundo tiempo ante Defensores y el rendimiento ante Chicago hacían imaginar un San Telmo protagonista ante el anteúltimo equipo en la tabla de posiciones. Fue todo lo contrario. Un equipo confundido, sin ideas e impreciso en las salidas desde el fondo y la mitad de cancha hicieron que el partido de a poco se vaya volcando en favor de el conjunto local, que sin demasiado mereció quedarse con la victoria.
La primera etapa realmente fue penosa. Armenio fue levemente superior en el dominio, principalmente cuando la pelota pasaba en los pies de Cisterna y cuando aprovechaba las bandas, más que nada a las espaldas de Ferreira por donde llegaron algunos centros peligrosos. Telmo estaba perdido, Badell y Esquivel no encontraron su lugar en la cancha, Ramos no podía escalar por derecha y de esa forma se hacía casi imposible generar opciones de gol en los delanteros. Pelanda tuvo el primero en una media vuelta que pasó cerca del travesaño y más tarde Gambandé, figura del partido, le tapó con las piernas un mano a mano a Gaspari, que había entrado sólo por izquierda.
El complemento no cambió para el Candombero. Siguió sin rumbo y la única arma que parecía quedarle a favor era su solidez defensiva. Gambandé agrandó su actuación sacando dos bochazos tremendos cuando el partido entraba en la recta final. Primero un remate a quemarropa de Maidana que desvió con los puños, y luego sacando al córner una volea de Pelanda que tenía claro destino de red. Un cabezazo de Vaccaría en posición adelantada fue hasta ese momento la única llegada de San Telmo. Pero sobre el final, cuando ni siquiera Armenio ya intentaba atacar, el equipo de Reinoso tuvo su chance más clara en los pies de Ramos, que capturó un rebote fuera del área, remató en forma de globo y Caviglia le ahogó el grito volando espectacularmente para sacar la pelota por encima del travesaño, siendo esta jugada la última del partido.
Nuevamente bajamos un par de escalones en cuanto al rendimiento, cuando parecía que definitivamente la regularidad en el mismo se hacía presente. ¿Será un complejo que tendremos que soportar hasta el final del campeonato?¿Ganaremos en algún momento dos partidos en forma consecutiva? Preguntas difíciles de descifrar, pero que esperamos en algún momento puedan resolverse positivamente.
EL PODIO:
ORO: Sin dudas Gambandé fue lo mejor del equipo. Tapó varias bochas increíbles y salvó la derrota.
PLATA: Parece repetitivo pero Julio Caldiero sigue siendo una fiera. Parece un pibe. Impasable, ordena y es el emblema de la defensa.
BRONCE: Vacante
ALUMINIO: Marcelo Lamas tuvo una tarde para el olvido. Errático, siempre a destiempo y flojo en la marca. Le tocó ser dueño de la mitad de la cancha y estuvo lejos de serlo.
CORTITAS:
- Nos dolió a todos... escuchar los gritos de Mendoza en el momento de la lesión. Debió ser trasladado en ambulancia a un hospital de Escobar.
- Esta vez no hubo cábala... ya que no pudimos cambiar la camiseta tradicional por la blanca en el entretiempo. Armenio solo poseía indumentaria blanca.
- Arreglamos el empate?... preguntaba Luciano Nakis (hijo de Noray) en la parrilla previo al partido.