San Telmo - 1
40' Daolio
Con un Daolio on fire y un gran primer tiempo del equipo, el Candombero aguantó en el complemento y se llevó una tremenda victoria de Lomas. Se ratificó el cambio de actitud y la historia pinta de otro color.
Todos los flashes fueron para él. Es cierto, el conjunto de Reinoso reafirmó en la cancha que ya no es el de semanas atrás. Pero, con sus atrevidas gambetas, su entrega y el único gol de la noche su figura se hizo estelar. El Chucky Daolio tuvo "su" noche y junto con su banda hicieron temblar Lomas de Zamora. Ojo, el resto de la sinfonía también se hizo notar, con una defensa aceitada, un medio campo batallador y una delantera que hizo las cosas bien, aunque pudo haber hecho estragos si no fuese por varios chances desperdiciadas.
Las dimensiones del campo de juego dejaban en claro las grietas de la defensa de Los Andes. Eso el Candombero lo entendió desde el principio e intentó siempre atacar por los costados. Entre Lezcano, Daolio y Vaccaría salía triangulaciones y espacios que generaban dolores de cabeza en el público local. Telmo se acomodó con los minutos, tras sufrir en los primeros instantes del partido. La mitad de cancha del Milrayitas era una zona libre de paso, por lo tanto Gauto y Coyra tuvieron libertad para conectar rapidamente con la zona alta. El fondo del conjunto de Rizzi demostraba porqué su arquero es el más goleado de la temporada, y el gol santelmista se presagiaba. Una corrida de Vaccaría dejó sólo a Daolio y con un potente derechazo venció la resistencia de Caceres para convertirse en la apertura del marcador, sobre el final del primer tiempo.
Por obligación, Los Andes tuvo que adelantarse en el complemento. Sin achicarse, Telmo cambió la flecha por el escudo y se replegó, aunque de contra lo tuvo en varias oportunidades. Más que nunca apareció la sobriedad de Caldiero, estandarte de la defensa, y las manos de Gambandé, para tapar pelotazos desde afuera y bajar centros complicados. La expulsión de Gauto, a quince del final, hizo que el sufrimiento se multiplicara, aunque el festejo cuando Lamolina pitó el cierre fue aún mayor. Telmo ganó de visitante luego de una rueda entera y fue noticia.
No quedan dudas que este es otro equipo. Con aires renovados, una mentalidad ganadora y otro estilo de juego aparecen las victorias, las situaciones y los goles. El objetivo de permanecer sin sobresaltos en la B está en marcha, sólo queda seguir por este camino.
EL PODIO:
ORO: Descollante, deslumbrante. Daolio fue una pesadilla para la defensa rival. Marcó el gol del triunfo y pudo convertir otros.
PLATA: Otro puntal fue Caldiero. Desde su solidez se edificó la defensa, que se mostró segura y tranquila ante cada embate del local.
BRONCE: Varios candidatos, pero Gambandé, por su seguridad y una tapada sensacional de una bocha que iba al ángulo, se queda en el podio.
ALUMINIO: Sigue Vacante, por suerte.