¿VIEJA O MAGO?

San Telmo - 1
44' Coyra
Acassuso - 0


Resulta increíble que una sola persona cambie tan drasticamente el entusiasmo y nível de los jugadores. En el debut de Reinoso, el Candombero cortó lo que parecía iba a ser la peor racha de la historia, con pelota al piso y la actitud que esperabamos.

En sólo dos dias con el plantel, el flamante director técnico de Telmo logró lo que ninguno pudo en este último y olvidable tiempo, que es contagiarlos de convicción y energías para despegar de una vez por todas. Podemos, pero no vamos a entrar en la polémica que pone en el foco de la tormenta a los entrenadores que se sucedieron y no encontraron respuestas en estos jugadores. Hoy tenemos que disfrutar de algo a lo que nos habiamos desacostumbrado, ganar. El equipo jugó como debía hacerlo y como nunca tendría que haberlo dejado de hacer, más allá de quién este al mando del mismo y el sistema táctico que se utiliza. Se puede vencer, empatar o perder, pero la actitud nunca se negocia, y nosotros reprochabamos eso: lo que no se podía negociar.
También es importante volver a enfocarse en el resumen de un partido y desmenuzarlo para el analisis. Los últimos, sencillamente, no eran meritorios de analizar. Este sí. Desde un Gambandé seguro y tapando pelotas fundamentales, pasando por una defensa que siempre intentó ser prolija y se mostró sólida, con un mediocampo ordenado y versátil, hasta llegar a una delantera voluntariosa y complicada de marcar para el rival. San Telmo fue un equipo, y hace cuanto queríamos que lo fuera nuevamente.
El primer tiempo tuvo baches. No se podía pretender que de un partido al otro, más allá del cambio, el Candombero fuera una luz. Pero desde el comienzo se intuía otro espiritu. La más clara fue un centro que termino con Seevald casi dentro del arco sin poder empujar una pelota que el defensor rival sacó en la línea. Acassuso respondía con remates desde afuera pero se encontraba con un sobrio Gambandé. Lo distinto fue que San Telmo siempre quiso jugar por abajo. Resigno esos irritantes pelotazos de los últimos partidos. Desde los pies de Lezcano y Coyra, que pasaron de ser mendigos a millonarios si hablamos del nível, se generaba el juego que tanto hacía falta y se abría y contagiaba a los demás. Se intentó por los costados, más que nada por el costado de Ramos, y también con los delanteros que siempre colaboraron en la creación y retrasaron su posición para tomar contacto con la pelota. Igualmente tuvimos que esperar hasta el final de esa etapa para desahogar ese festejo atragantado. Cuando el entretiempo aparecía como protagonista, un rebote que capturó Coyra tras tiro libre bien pateado por Lezcano, se convirtió en el gol que festejamos por multiplicado, por todos esos que se venían negando.
En el complemento hubo tiempo para todo. Se pudo liquidar y terminamos sufriendo algunos embates del Quemero. Con Gambandé como estandarte, tapando un mano a mano, pelotazos desde afuera y descolgando centros, Telmo iba por más y no pudo cerrar el partido antes que finalice. Con innumerables contras se encontraron Vaccaría y Daolio, pero el que más perdono fue Lezcano. En alguna por tardar un segundo más, en otra por mala puntería y también por pecar de egoísmo. Sin embargo es importante que se vuelvan a tener opciones de gol, ahora hay que ajustar ese puntazo final y que los delanteros metan ese poroto que les brinde confianza. Telmo lo aguantó, fue superior al rival y ganó después de muchísimo tiempo.
Es imperdonable la racha que tuvimos y que por suerte se pudo cortar. Sin embargo, los números muestran que, a pesar de haber perdido mucho terreno, todavía queda ese margen para estar algo aliviados en los promedios. No hay que relajarse, haber terminado con la malaria no significa haber logrado el objetivo. A seguir con ésta actitud, orden y juego.

EL PODIO:
ORO: Por su tarea en el partido y haber salvado sus diferencias con Reinoso por el bien del grupo, Gambandé se lleva el premio mayor.
PLATA: Sorprendió con su nivel. Hizo un gran desgaste y fue la manija en la mitad de cancha. Coyra recuperó la memoria.
BRONCE: A pesar de no haber terminado bien las jugadas, fue su mejor partido con la casaca de Telmo. Lezcano, esperemos, pueda mantener este nivel.
ALUMINIO: Por fin, Vacante.